La osteopatía visceral es una forma especializada de osteopatía que se centra en el diagnóstico y tratamiento de disfunciones en los órganos internos del cuerpo.
Este enfoque terapéutico reconoce la interconexión entre los órganos, los tejidos y el sistema musculoesquelético, y busca mejorar la salud y el bienestar al abordar las restricciones y desequilibrios que pueden afectar el funcionamiento adecuado de los órganos.
En una sesión de osteopatía visceral, un osteópata realiza una evaluación exhaustiva de tu historia médica, síntomas actuales y patrones de movimiento, así como también lleva a cabo pruebas físicas para evaluar la movilidad y función de los órganos internos. Basándose en esta evaluación, el osteópata utiliza técnicas manuales suaves para liberar cualquier restricción o tensión que pueda estar afectando la función de los órganos.
La osteopatía visceral puede ser beneficiosa para una variedad de condiciones y síntomas, incluyendo problemas digestivos como el estreñimiento, el reflujo ácido y el síndrome del intestino irritable, así como también trastornos respiratorios, problemas menstruales, dolor lumbar crónico y más. Al mejorar la función de los órganos y restaurar el equilibrio en el cuerpo, la osteopatía visceral puede ayudarte a aliviar el dolor, mejorar la función digestiva, aumentar la energía y promover la salud en general.
Es importante destacar que la osteopatía visceral es un enfoque complementario y no debe utilizarse como sustituto del tratamiento médico convencional. Si estás considerando la osteopatía visceral como parte de tu plan de tratamiento, te recomendamos consultar con un osteópata calificado para discutir si es adecuada para ti y tus necesidades de salud específicas.